Acércate un poco más para que puedas recostarte así, a mi lado, que quiero todo contigo desde que el aire no es el mismo, desde que mis pies no tocan el suelo, corazón, porque no hay nadie como tú. Caigo en ti, y caigo en cuenta de lo aleatoria que es la vida, entre crudas reflexiones cubiertas de tierra muerta con decenas de niños sonrientes que miran o entre cerebros de dueños que alguna vez fueron y que no están más. Yo quiero ser contigo. Yo no te cambio por nadie.
Veinteañera sin fracturas ni operaciones, noctámbula como muchos, fanática del queso, maniática de la Internet, idealista que suele ponerse surrealista y penúltima romántica. Creé este blog porque quería ser escritora y para abrir mi cabeza y no ahogarme allí. No me hago la interesante.