Desvaríos ligeros y otros más profundos

27 de diciembre de 2014

27 de diciembre

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Hace un año tu cuerpo se despidió de la superficie. Hace un año exactamente estuve en la misma posición, en la misma cama, pensando en ti, en cuánto me quisiste y en cómo me quisiste. Me siento especial al recordar que fui una de las pocas personas a las que quisiste en tu vida. Yo te quiero, siempre te voy a querer.

Hace un año precisamente cantaba la canción que escuché cada tarde mientras tu vida se apagaba en diciembre. No cerré la puerta, ajusté las piernas por si alguien hubiera entrado y si la falda me hubiera traicionado, y abrí la boca. Tenía el mismo nudo en la garganta que tengo ahora.

No lloré más que una noche, reconozco que no admití cuánta falta me hiciste. Nadie me engríe como tú, pero así estás mejor si es que todavía estás, donde quiera que estés. Lo tuyo ya no era vida, no es vida ir muriendo sin esperanzas.

Hasta que nos reencontremos, Noemí. Espero que al fin tengas paz. La señora 'chango' pregunta por ti. Todos preguntan por ti.